miércoles, 3 de febrero de 2016

Un día cualquiera...


Uno de esos días en los que parecía que iba  a ser un día más, llegaron tus ojos y mi mirada se perdió en ellos. Mi talle encontró aquellos brazos que sabían hacer sin necesidad de ser guiados. Y encajaban y ajustaban, en la justa medida del molde perfecto. Un abrazo nos dejó impregnados del aroma del cuerpo desconocido, reconocido como el que complementa lo más profundo del propio ser. Palabras parpadeadas en miradas mantenidas. Besos derramados desde la piel, sin labios, sin lengua, sin dientes… Palabras que se hacen eco de las que salen de la boca desconocida, la que destila la potencia del sentir….

 
Uno de estos días tiro la casa por la ventana, quemo mis naves, me corto la melena, tatúo profundamente tu ser en mi alma y echo a volar lejos de tu recuerdo.

1 comentario:

  1. Con más poesía cada día
    con alegre profundidad
    con exión de mente y corazón.

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